A día de hoy, se está alertando de que otros exchanges no tendrían liquidez suficiente para afrontar retiros masivos de clientes tras lo ocurrido con la bancarrota de FTX. Como alternativa de custodia a los mismos, exponemos el motivo por las que tener una wallet fría es fundamental.
Not your keys, not your coins
Esta frase traducida literalmente al español diría algo así «No tus claves, no tus monedas». Esta es una máxima que cualquier persona que este inmerso en este ecosistema tendría que tener presente siempre. Las criptomonedas guardadas en un exchange no les pertenecen a los usuarios al igual que el dinero fiat depositado en un banco, es propiedad de la entidad financiera.
Esto es así porque únicamente el banco o el exchange tiene una obligación de pago que ha contraído con su cliente por el cual, refleja en una cuenta bancaria el balance total que debería pagarle. Si el cliente «Pepe» tiene 10 bitcoins y 2 ethers en su cuenta de Binance, este tiene la obligación de devolverle esa cantidad si «Pepe» decide venderlo o transferirlo de manera instantánea.
El inexistente coeficiente de caja agrava la situación
En cambio, en muchas ocasiones suceden los temidos retrasos y bloqueos en los que el usuario se encuentra vendido y tiene que esperar, perjudicándolo seriamente. Esto se genera porque los exchanges no tienen que mantener por ley un porcentaje de sus reservas que se conoce como coeficiente de caja.
Dicho término en el sector financiero tradicional, permite que las entidades financieras sólo tengan la obligación de mantener de manera líquida el 10% de todos los depósitos de los clientes. El restante 90% puede utilizarse por la entidad para cualquier otro fin como si fuese su propio dinero.
En el caso de la mayoría de los exchanges, el coeficiente de caja es mucho menor por lo que tienen la libertad de utilizar ese capital para invertirlo mediante diferentes estrategias y así obtener un rendimiento que irá íntegramente a sus arcas.
Una wallet fría como única alternativa segura
Tras todo lo acontecido estas últimas semanas, se pone de manifiesto que tener criptomonedas en un exchange descentralizado es un riesgo innecesario, ya que, si el exchange no ha administrado bien esos fondos, se corre el riesgo de no poder disponer de los mismos como ha sucedido con la bancarrota de FTX.
Por tanto, la alternativa para esto siempre está en la compra de una wallet fría. Esta billetera es un dispositivo físico que sirve para almacenar nuestras monedas con un pin y una frase semilla (combinación de 24 palabras), que hará imposible que otra persona logre tener acceso a nuestra cuenta (ni mediante un robo).
Existen numerosas «cold wallets» reconocidas como Trezor, Ledger o Safepal. Todas ellas cuentan con los mismos sistemas de seguridad y las únicas diferencias apreciables radican en el diseño, los materiales de fabricación o el espacio de almacenamiento que puede diferir entre algunos modelos.
¿En qué momento deberían comprarse?
Si es cierto que la mayoría de ellas tienen un precio que rondan los 80$-100$. Por tanto, puede ser un buen momento de compra cuando el valor de sus criptomonedas supere o esté cercana a esa cantidad. Mientras tanto, existen alternativas de billetera en línea o denominadas «hot wallets» que son gratuitas pero un poco menos seguras al necesitar de conexión a Internet.