Durante el 2022, el mundo del Play-to-Earn, sufrió una caída desde su máximo histórico. Eso ha hecho que algunos se pregunten si estos campos están muertos o realmente, lo que se necesita es un reenfoque del sector o un crecimiento orgánico.
2022 fue un año de récord
A pesar del mal año que tuvo el sector de la Web 3 durante e 2022, los NFTs y los juegos, tuvieron una recaudación total de 8,3 mil millones de dólares. Esta cantidad supone un máximo histórico de capital recaudado por una categoría en un año de calendario.
Los juegos de realidad virtual, y juegos que interactúan con el metaverso y blockchain, fueron los temas preferidos por los inversores. La mitad de inversión son de subcategorías como Game Studio, Gaming y VR/Metaverse
Dentro de los 3 continentes más desarrollados, Asia ha sido tanto en 2022 como en 2021 el continente donde más ha incrementado el interés por el sector Gaming/NFTs.
La cantidad de nuevos proyectos fundados en 2021, ha aumentado en un 400% interanual. Cuando analizamos el monto total recaudado del 2022 contra el 2021, podemos observar cómo en Asia llego a crecer en un 9242% anual, mientras que en Norte America, un 7190% y en Europa un 3643%. El crecimiento de Asia es desorbitado, pero no debe de atenuar el también asombroso crecimiento de Europa y Norte America.
Fracaso del Play to Earn
Desde luego, el mayor fracaso del mundo del Play to Earn ha sido Axie Infinity. Axie Infinity se puso de moda. Su token fue, desde $0,25 hasta los 165$ en su pico de 2021.
Sin embargo, este proyecto se vio envuelto en un mar de decepción. La decepción de los inversores de Axie Infinity vino dada principalmente, por la decepción de todo el sector en general de Play to Earn. El sector necesita reenfocar la idea para que puedan resurgir nuevos proyectos.
Una burbuja que explotó
Cuando a finales de 2021, el sector de los NFTs comenzó a repuntar, el Play to Earn le siguió. La categoría llego a tener un crecimiento del 562% en los últimos 5 meses, comparados con los 16 trimestres anteriores. Tanto el Play to Earn como los NFTs, lideraban las rondas de financiación de los inversores, desde la fase pre-semilla, hasta la semilla y posteriormente la ronda de financiación de Serie A.
Todo ello se veía incentivado por el momento macroeconómico, donde había más dinero que nunca para invertir. Los bancos emitían préstamos a diestro y siniestro y el acceso al dinero se volvía cada vez más fácil.
Sin embargo, la inflación para poder emitir esos préstamos y para evitar la crisis provocada por el virus, tuvo sus consecuencias, y los bancos centrales comenzaron a subir los tipos de interés, generando una escasez de liquidez y mayor dificultad de acceso a capital, lo que conllevó a que todos los mercados cayeran en picado, no solo el de los NFTs o el Play to Earn, sino también las demás criptomonedas y entidades ajenas a la blockchain.
¿Posible futuro auge?
El sector del Play to Earn, va muy ligado a otros sectores como el del metaverso o el de los NFTs. Es por ello, que para que este sector repunte, es necesario que también lo hagan los otros.
Parece ser, que el sector de los NFTs se está empezando a recuperar. Por lo tanto, podemos esperar que el Play to Earn también se recupere, renovándose.