En la industria de las criptomonedas, los exchanges centralizados (Cex) son las empresas más ricas del sector. De hecho, más de la mitad de las 10 personas más ricas de este sector son dueños de alguno de los Cexes más lucrativos del ecosistema. Aunque tienen varias fuentes de ingresos, existe un modelo de negocio que no es tan intuitivo de averiguar.
Las fuentes de ingresos tradicionales de un Cex
Por norma general un Cex cuenta con varias fuentes de ingresos, algunas más explotadas que otras según el segmento de cliente al que se dirija y como no, también según su volumen de usuarios y de negociación de los diferentes activos. Algunas son:
Comisiones de depósitos y retiro de Fiat
Suelen tener un socio colaborador o su propia licencia de Institución Monetaria Electrónica (EMI) para permitir estos depósitos y retiros en Fiat que facilitan al usuario la unión entre estos dos mundos que se retroalimentan para el bien común. Suelen tener unan comisión interesante.
Comisiones de Trading en Spot y Futuros
Es la comisión que se cobra al realizar un intercambio entre criptoactivos. Normalmente, suele ser más alta de la que mencionan en sus políticas debido al spread. Esto hace referencia a la diferencia entre el precio de mercado y el precio real al que se ejecuta tu orden.
Por su parte, en el trading de mercados de derivados ocurre lo mismo. Aunque en este caso, aproximadamente el 50% de las comisiones que se generan van para los «Market makers», instituciones que proveen de liquidez a estos mercados. Por ende, el magen de beneficio es limitado.
En este ejemplo, observando el volumen a las 24h del exchange FTX, y se calculase cuanto ganaría en comisiones en comisiones de spot al 0.1%, el resultado sería de unos 125.000$ diarios, que corresponderían a 3,75 millones de $, cantidad insuficiente para cubrir gastos derivados de su actividad.
Aparte, existen muchas verticales del negocio como podrían ser los servicios de nodos validadores o las comisiones de tokens apalancados, que incrementan el flujo de ingresos recurrentes de las grandes compañías. Sin embargo, el negocio real es mucho más grande.
La fuente de ingresos que acapara todo
Para comprender este negocio, se debe entender cómo funcionan los futuros/perpetuos. Este tipo de productos nos permite apalancarnos con dinero del exchange (a modo de préstamo), para operar con más dinero del que disponemos en nuestro balance.
A partir de que nos realiza ese «préstamo» de dinero, empezamos a jugar en su contra. Es decir, si el cliente gana su operación, el exchange perderá el dinero equivalente y si ocurre lo contrario, será el exchange el que lo gane en detrimento del usuario.
De hecho, el secreto de este modelo radica en la en la que el exchange gestiona su riesgo que tiene en los futuros. Ahí es donde se origina esta rama de ingresos tan lucrativa. Además, el modus operandi de esta gestión es tremendamente obvia.
Para ello, imaginémonos que tenemos un exchange y existe un trader que tiene un ratio de acierto muy elevado y hace que perdamos dinero con bastante frecuencia. Tenemos que frenar esas constantes pérdidas de alguna manera.
Para ello, estos exchanges utilizan bots que replican automáticamente las operaciones de nuestro trader objetivo, en otros exchanges de manera que, cedemos nuestro riesgo a otro exchange de la competencia, eliminando por completo el riesgo de contrapartida con nuestro trader.
Finalmente, se va generando una pirámide en la cual el riesgo de los traders profesionales es asumida por los exchanges más grandes, que poseen unos volúmenes de negociación gigantes que para ellos se convierten en insignificantes.