El sector de las finanzas descentralizadas ha supuesto una tremenda revolución en el acceso a productos financieros de usuarios que estaban fuera de este sistema En cambio, el anonimato tras una simple billetera impedía personalizar condiciones de préstamos según el tipo de personas. A partir de ahora, esta demanda está cogiendo forma.
La importancia de establecer un puntaje crediticio
El sector DeFi ha mejorado notablemente el acceso a la financiación a usuarios un tanto desbancarizados, así como a inversores que han construido un notable patrimonio en este ecosistema de las criptomonedas. A ambos, también les brinda la oportunidad de generar rentabilidades adicionales de sus criptomonedas «holdeadas» a largo plazo.
Sin embargo, este entorno carecía de algo muy característico que en las finanzas tradicionales es algo muy común: el puntaje crediticio. Este sistema que asigna una puntuación específica al prestatario en función de su capacidad para devolver el préstamo ha sido la base de los mercados de capitales, limitando de esta manera los riesgos de impagos que tanto daño hacen a la banca.
DeFi surgió sin la necesidad de establecer esto porque para acceder a préstamos, era necesario ceder unos criptoactivos en garantía por un valor superior al crédito solicitado. Pero tras sufrir su primer mercado bajista, las liquidaciones mermaron la eficiencia de capital. Y tras esto, la necesidad de replantearse la necesidad de instaurar un sistema crediticio.
TransUnion se ofrece a calificar a los usuarios DeFi
TransUnion, compañía estadounidense dedicada a la calificación del riesgo de impago de los inversores, anunció recientemente que está capacitada para suministrar puntuaciones de crédito para los prestamistas de las finanzas descentralizadas, sin comprometer excesivamente la privacidad de los solicitantes.
Este hecho supone un hito sin precedente y los primeros beneficiados serán los ciudadanos estadounidenses. Por el momento, no ha trascendido si serían capaces de puntuar a ciudadanos de otros países, ya que tendrían que tener acceso a información bancaria de otros países.
¿Cómo se integrarían estos datos en la blockchain?
El principal problema técnico a la que se enfrenta TransUnion es el trasvase de datos a las aplicaciones descentralizadas de mercados de capitales como Aave por ejemplo. Para solucionar esto, cuentan con la inestimable colaboración de la startup Quadrata.
Quadrata es una empresa que ofrece un pasaporte web 3.0 en forma de un Souldbound token. Este token es una especie de NFT que es intransferible y permite que esa wallet guarde toda la información reputacional y crediticia del usuario para que pueda obtener mejores condiciones de financiación según su informe crediticio.
La privacidad como sacrificio
Con este tipo de iniciativas, la privacidad del usuario queda totalmente expuesta. Sin embargo, esto no quiere decir que los datos estén peor protegidos, pero inevitablemente el pseudoanimato que garantiza la blockchain se pierde en tal caso.
En cambio, John Sun director ejecutivo de Spring Labs, empresa asociada a Quadrata y TransUnion para reforzar la seguridad de los datos, afirmaba lo siguiente relacionado con este tema:
» A medida que más consumidores y prestamistas recurren a blockchain para hacer negocios, es importante garantizar que se logre el equilibrio entre la información que los prestamistas necesitan para evitar el riesgo y la privacidad y el anonimato que esperan los usuarios de la tecnología».
Pero a pesar de esto, puede contribuir a que los prestatarios mitiguen esas pérdidas de sus criptactivos colaterales porque tengan acceso a condiciones únicas más ventajosas, a la vez que intentan dificultar el rastreo de sus operaciones para ganar un poco de más privacidad.