El oro es un metal precioso que ha actuado muy bien como valor refugio cuando se han sucedido diversas crisis económicas a lo largo de la historia. Principalmente, es la única utilidad que tiene hoy en día. Sin embargo, gracias a la blockchain, se han transformado gran parte de sus inconvenientes en ventajas. Conozcamos un poco más de cerca este «sintético del oro».
PAX Gold, el token referenciado al oro
Tras haber experimentado de forma exitosa con monedas que se encuentran ligados al dólar americano, el ecosistema cripto ha visto el nacimiento de un token que se encuentra íntimamente ligado con un activo de millones de años, como es el oro. PAX Gold trae la posibilidad de poseer oro virtual como el de antaño.
Este token fue creado en la blockchain de Ethereum bajo el estándar ERC-20, cuyo valor se encuentra respaldado por lingotes de oro físico. Por cada $PAXG que existe en el mercado, equivale a una onza troy de un lingote de oro «London Good Delivery de 400 onzas, custodiada en bóvedas especiales.
La compañía Paxos, emisora del token
Paxos es una compañía que ofrece soluciones blockchain a clientes empresariales, permitiendo el movimiento fiable e instantáneo de cualquier activo en cualquier momento como mencionan en su página web. Entre sus clientes más relevantes destacan el Banco de América, PayPal, Credit Suisse o Binance.
De hecho, colabora con este último en la emisión de su moneda estable ligada al dólar BUSD. Además, esta compañía está bajo la supervisión y regulación del Departamento de Servicios Financieros del Estado de Nueva York. Por tanto, todos sus productos están sometidos a auditorías regulares.
¿Qué ventajas tiene frente al oro físico?
Como se mencionaba anteriormente en la introducción, mejora algunas de las desventajas que presenta el oro físico. Una ventaja de poseer esta versión digital es su bajo coste de almacenamiento, ya que los gastos asociados por «holdearlo» son nulos. Apenas se incurre en una comisión del 0,02% y el correspondiente ETH para las comisiones de gas en caso de querer transferirlo.
Además, se le suma la facilidad de intercambio. Su amplia liquidez y la existencia de numerosos exchanges que lo aceptan permiten que en cualquier momento pueda ser intercambiado por otras criptomonedas en incluso dinero fiat. En el caso cambiarlos por lingotes de oro, la página web de Paxos te permite esa opción.
¿Qué riesgos habría que tener en cuenta?
Pues el principal es el riesgo de centralización y la dependencia de una empresa externa. Si bien Paxos cuenta con garantías contra la bancarrota y constantes auditorías que verifican minuciosamente sus reservas, el riesgo no se mitiga del todo.
Además, contamos con los riesgos inherentes a los contratos inteligentes. Más allá que los desarrolladores de Paxos trabajan para emplear el mejor estándar, esta tecnología aún es víctima de continuos ataques e intentos de hackeos.
Conclusiones finales
A modo resumen y conclusión, considero que es una buena alternativa a poseer oro físico, sobre todo para aquellos inversores que ya sean experimentados en el ecosistema de las criptomonedas y blockchain. La adopción masiva de esta forma de almacenar oro dependerá mucho de la percepción sobre este ecosistema del resto del mercado.
Los pros y los contras están bien definidos por lo que lo más apropiado, es siempre diversificar tanto en activos según riesgo, como en diferentes «derivados» que puedan proporcionar una sustancial ventaja o potencia inconveniente de otra manera.